Los avances en el campo de la robótica siguen apuntando aplicaciones espectaculares, que en poco tiempo (menos del que podemos suponer) cambiarán la forma de relacionarnos con estos aparatos hechos de microcircuítos y piel metálica que cada vez tienen un mayor grado de autonomía.
Este es el caso del Micro Air Vehicle, un helicóptero, desarrollado en el Instituto Tecnológico de Massachussets (MIT, en sus siglas en inglés), que puede volar de forma autónoma, esquivando los obstáculos que salen a su paso, y volver sin ningún tipo de problemas a su lugar de origen sin la intervención de un ser humano. Algo parecido al robot explorador EVA de la película Wall-E, pero eso sí, mucho menos atractivo desde el punto de vista estético.
Para conseguir este grado de autonomía, este curioso helicóptero (de pequeñas dimensiones) utiliza una serie de cámaras que le ofrecen una visión en tres dimensiones del lugar en el que se encuentra, gracias a un sistema de sensores que utiliza la tecnología del láser para el reconocimiento de formas (tanto en movimiento como en posición estática), y a un sistema GPS que le ayuda en todo momento a saber en qué lugar geográfico se encuentra y las coordenadas necesarias para llegar al lugar de destino seleccionado.
De esta forma, el Micro Air Vehicle (como puedes comprobar en los vídeos) puede pasar sin dificultades a través de una ventana, o explorar el entramado de pasillos o habitaciones de un edificio sin la necesidad de tener información previa sobre su estructura o diseño constructivo. Además, según apuntan sus creadores en un dossier explicativo del proyecto colgado en la red, este helicóptero es capaz también de localizar objetos de interés sin que actúe ninguna persona. Entra, inspecciona, localiza y se larga por el mismo sitio que ha venido.
Imagínate las futuras aplicaciones de este curioso aparatejo. Seguro que será adquirido, con toda premura por las autoridades militares de Estados Unidos para operaciones de investigación o espionaje. Pero eso sí, antes sus creadores deberán reducir el ruido de sus cuatro hélices.